La relación entre la alimentación que aportamos a un cachorro durante toda su etapa de crecimiento y las posibles enfermedades articulares que pueden desarrollar es especialmente importante en el caso de los perros de tamaño grande y gigante (consideramos razas grandes a partir de 25 kg de peso) Hasta un 20% de las enfermedades musculares y esqueléticas (enfermedad ortopédica del desarrollo) pueden tener su origen en un problema nutricional.
¿Qué es la enfermedad ortopédica del desarrollo?
Un grupo de enfermedades músculo esqueléticas que afectan a los animales en crecimiento, las más frecuentes son:
Osteocondrosis dissecans
Displasia de cadera, codo
Deformidades angulares de los miembros
Cojeras y raquitismo.
Si bien está demostrado que el papel de la genética y la herencia de los caracteres son muy importantes en el desarrollo de estas enfermedades, también se sabe que los factores ambientales (nutrición, tasa de crecimiento, actividad física) son claves en que la enfermedad se manifieste.
Por ejemplo, en el caso de la displasia de cadera el factor hereditario tiene un peso del 40% sobre la manifestación de la enfermedad y los factores ambientales un 60%
¿Qué relación tiene la aparición de problemas en el desarrollo y la alimentación de nuestro cachorro?
Las alteraciones del desarrollo esquelético durante los periodos de rápido crecimiento son el resultado de una sobrecarga sobre el esqueleto en desarrollo, producido por un incremento prematuro de la masa muscular.
Los huesos de las razas de mayor tamaño tienen menos densidad que los huesos de razas de tamaño pequeño por lo que no son tan fuertes durante el crecimiento. Si estamos alimentando a un perro de raza grande con una cantidad excesiva de alimento de calidad formulado para cachorros, el cachorro antes de acumular el exceso de energía en forma de grasa lo que hace es crecer más rápido: los huesos no están preparados para soportar el exceso de peso Esto nos conduce a las alteraciones de la osificación (transformación del cartílago de crecimiento en hueso), lesiones en los cartílagos de las articulaciones y cierres prematuros de las epifisis (lo que puede producir deformidades de las patas).
Otra de las causas del desarrollo de las enfermedades del crecimiento es la ingesta elevada de calcio: a pesar de que la “sabiduría popular “ y de muchos criadores aconsejen la suplementación de la dieta del cachorro con pastillas de calcio. Un exceso de calcio en la dieta puede darse por la “buena fe” de suplementar un pienso de calidad con pastillas de calcio o por administrar un pienso de mala calidad que no lleva concentración de calcio adecuada ni la correcta relación calcio: fósforo.
Este exceso interfiere con la remodelación de los huesos en crecimiento, de manera que se deposita un exceso de hueso o afecta a la maduración del cartílago produciendo la osteodistrofia hipertrófica y la osteocondritis disecans respectivamente.
¿QUÉ COMPONENTES DEL PIENSO SON LOS MAS IMPORTANTES A LA HORA DE ALIMENTAR A NUESTRO CACHORRO?
La energía que ingiere el cachorro:
La ingesta de energía es el principal factor nutricional determinante de la intensidad del crecimiento; el riesgo de alteraciones del crecimiento aumenta en animales de razas grandes que consumen alimentos equilibrados densos en energía, muy apetecibles y que tienen libre acceso.
La densidad energética de un alimento depende de su contenido en grasa, a medida el contenido de grasa aumenta la densidad energética también incrementa. Como la aceleración de la velocidad de crecimiento en razas grandes y gigantes es un factor de riesgo, podemos deducir que se considera un factor de riesgo el aumento del contenido de grasa (> 12% en base a materia seca); sin embargo, el alimento debe contener cierta cantidad de grasa para permitir la absorción de vitaminas liposolubles y mejorar su sabor.
¿Cómo calculamos las necesidades energéticas diarias de un perro en crecimiento?
La ingesta de energía es máxima en relación con el peso corporal entre el segundo y el cuarto mes de vida; en general se considera apropiado suministrar el triple del Requerimiento energético en reposo (RER) como requerimiento energético diario desde el destete hasta los cuatro meses o hasta que alcance el 50% de su peso de adulto; y después hasta el año de vida administramos el doble del RER.
Para simplificar los cálculos se puede consultar la tabla que se adjunta al final del artículo, donde se da una orientación sobre el peso adecuado del cachorro según su edad y el peso definitivo a alcanzar.
Se recomienda pesar a los perros cada dos semanas y evaluar su condición corporal para realizar los ajustes necesarios. El objetivo de los programas de alimentación para cachorros de razas grandes y gigantes es lograr una restricción moderada de energía, que puede suponer una reducción de la ingesta de entre el 10 y el 25% comparado con lo que ingeriría el animal con el método de libre acceso.
Esta recomendación no implica que el animal pase hambre u ofrecer al animal un alimento formulado para otra etapa de la vida que no sea el crecimiento.
Estos cachorros deben recibir los niveles diarios de recomendados para satisfacer las necesidades fisiológicas para el crecimiento esquelético óptimo, junto con restricción moderada de energía.
El crecimiento lento durante el primer año de vida NO reduce el tamaño de adulto final. Podemos pensar entonces que si los piensos para cachorros tienen mucho contenido energético, podemos darles un pienso de adulto para que así crezcan más despacio:
¿Qué pasaría si no alimentamos a un cachorro con un pienso de crecimiento?
Los piensos formulados para perros adultos no contienen tanta energía como los de cachorro y no son tan digestibles, el cachorro no puede aprovecharlos al máximo; entonces al intentar cubrir sus necesidades energéticas con este tipo de pienso el cachorro come continuamente y su digestivo está siempre lleno; los inconvenientes de esto son a parte de la alta producción de heces; que el estómago lleno más el ejercicio físico pueden hacer que el ligamento que sujeta al estómago en su posición se distienda predisponiendo a ese animal a la dilatación y torsión gástrica.
Además, al consumir más cantidad de pienso de mantenimiento ingiere más cantidad de calcio, con los problemas que esto conlleva. Si utilizamos un pienso especial para animales obesos, rico en fibra; el cachorro se siente lleno antes de que todos sus requerimientos minerales, proteínas o vitaminas hayan sido cubiertos.
Una dieta con poca proteína o proteína de baja calidad disminuye el crecimiento, causa un manto pobre, problemas en la cicatrización de las heridas, alteraciones del sistema inmune y descenso del desarrollo muscular.
Y que pasa con el calcio
El nivel de calcio recomendado debe considerarse junto con las recomendaciones de fósforo. La relación calcio: fosforo debe mantenerse 1,1:1; la cantidad absoluta de calcio en el alimento es más importante que la proporción CA: P durante el crecimiento canino. La ingesta prolongada de calcio aumenta la frecuencia y la gravedad de los problemas
articulares.
Es recomendable niveles del 0.7 % al 1.2% de calcio en los alimentos formulados para el crecimiento de cachorros de riesgo SIN AGREGAR COMPLEMENTOS. El contenido de energía y la concentración de calcio en el alimento son los dos factores más importantes para el correcto desarrollo óseo.
EN RESUMEN; COMO DEBO ALIMENTAR A MI CACHORRO DE RAZA GRANDE
Si es un animal de riesgo (raza grande o gigante, con tendencia a los problemas articulares: displasia de cadera, de codo, Osteocondrosis dissecans); controlar los nutrientes de interés evaluando la composición del alimento para que se ajuste a lo máximo a los requerimientos del animal.
Utilizar un pienso adecuado a la etapa de crecimiento. NO agregar suplementos de vitaminas o minerales (en especial de calcio, fósforo, vitamina D y A) a los alimentos equilibrados. Cada dos semanas pesar y controlar la velocidad de crecimiento del perro, evitando el sobrepeso; si el animal está creciendo a un ritmo demasiado rápido reduciremos un 10 % la ingesta de comida, si está demasiado delgado lo aumentaremos un 10%.
El objetivo de la restricción de la energía no es suministrar alimento de baja calidad y baja digestibilidad, sino de alta calidad y con baja densidad energética para promover el crecimiento apropiado.
Fuente: CLUB D’AGILITY CIUTAT COMTAL